Cinegramas, esta gran revista cinematográfica cuyo segundo número tienes, lector, entre las manos, nos hizo el honor de incluir en el que constituía su nacimiento a la vida periodística – que auguramos larga y próspera, a juzgar por el éxito que ha seguido a su aparición – un artículo dedicado al celebérrimo ratoncillo Mickey Mouse. En aquel trabajo ofrecíamos ocuparnos en uno inmediato – éste – de la magnifica instalación que en Hollywood se halla dedicada a la producción de esos encantadores films de dibujos animados, que bajo la denominación genérica de Silly Simphonys han aureolado de fama a itu creador, el genial artista Walt Disney, y de los cuales comenzó siendo protagonista insuperable Mickey, el gran actor de la copiosa serie zoológica que Wall Disney utiliza en sus admirables producciones.
En 1928 se proyectaron los primeros films de dibujos animados
Desde el año 1929, en que Mickey Mouse debutó triunfalmente en un pequeño cinematógrafo de Manhattan, la demanda de las Silly Simphonys en todo el mundo fué tan grande, que se necesario construir en Hollywood lo que pudiéramos llamar el Palacio de los Dibujos Animados. El coste de esta instalación rebasa la cifra 500.000 dólares, y por ello puede deducirse hasta qué punto es perfecto y capaz.
Una breves explicaciones
Veamos ahora, del modo sucinto y esquemático que permite un articulo periodístico, cómo se produce una Silly Simphony.
Estas películas suelen tener aproximadamente una longitud de 160 metros, y su duración en la pantalla no excede casi nunca de siete u ocho minutos. Y, ¿sabéis cuántos dibujos diferentes son precisos para un film tan breve? Pues nada menos que 5.000. Un hombre solo tardaría en realizar esta fantástica labor unos dos años; pero como habitualmente están dedicados a ella cincuenta dibujante, el tiempo empleado no excede de dos semanas.
Walt Disney dispone de 200 ayudantes, dibujantes de periódicos en su mayoría, a los que previamente ha sometido a un intenso aprendizaje, que consiste en hacerles estudiar, desde todos los ángulos imaginables, diversas fotografías; la pata de una vaca, la cola do un leopardo, el ojo de un pájaro...
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